A partir de los restos de Juanita y los Feos RATA NEGRA vienen dando muestra de su mordaz punk-rock desde su debut discográfico en 2017. Pablo (batería), Fa (guitarra y coros) y Violeta (voz y bajo) nos traen bajo el brazo su cuarto larga duración con Hawai (Sonido Muchacho, 2025). Diez canciones, con sus veintiún minutos de duración en total, exhibiendo un inusitado dominio sobre el término optimización.
El power trío va al grano de la mano de "Pesadilla adulta", un medio tiempo redondo que se enrabieta en el estribillo exhibiendo sin filtros la ansiedad que nos produce el día a día viviendo para trabajar. El bajo abre y cierra el corte a modo de ejercicio de simetría sonora.
"Antonio" acelera la escucha hasta el despeine mientras va soltando perlas líricas con retintín, como en el estribillo: <<Ay Antonio, Ay Antonio le metieron en el manicomio, una dosis de estramonio>>.
Se rebaja la intensidad con "Sobrepensando" (videoclip a pie de página), el tema más pop del disco. Su apacible luminosidad viste una certera reflexión sobre la salud mental. Como contrapunto surge el desboque guitarrero de "Mi opinión" reivindicando el derecho a expresarla, la "opinión" me refiero, o directamente gritarla si hace falta.
Con "Reza" le toca a la religión como blanco sobre el que apuntar su afilada lírica. Unos teclados procesados ponen la guinda a un corte ultra-sugestivo, casi podemos vislumbrar una aparición mariana mientras la escuchamos.
"Hawai" es el corte titular por méritos propios. Primer single avance del álbum armado con unas guitarras jangle-pop de quilates que deberían hacerte feliz. Esta huída a Honolulu esconde desesperación y desencanto, mitigada en parte por la luminosidad que desprenden sus notas. La portada del álbum ejerce de inquietante a la par que perfecto poema visual.
Volvemos a ponernos en modo velocidad con la punkabilly "Ojos verdes" conduciéndonos cuesta abajo hacia el hechizo de "Puro veneno". Su sabor añejo a musica beat sesentera se repitirá en otros pasajes de la escucha, como en la más garajera "Si no eres".
El disco se cierra con la sombría "Peligro" y esa distorsión guitarrera que quita el hipo. Aquí se hace bien patente la sensación de desasosiego latente en gran parte de Hawai y que RATA NEGRA combate con talentosa energía, honestidad y actitud, que no es poco.
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