Laura S. Núñez (bajo y voz), Vera Sillero (batería), Carlitos Nieves (guitarra y voz) y Pablo Porcar (guitarra y voz) son SALVANA y vienen desde 2022 dando muestras solventes de su poderío guitarrero shoegaze bien avenido con el post-rock y el dream-pop. Reversia (Intromúsica, 2025) es el debut en formato larga duración de la banda barcelonesa y la confirmación de los mejores augurios sobre su potencial.
Coproducido por Raúl Pérez (Biznaga, Viva Belgrado) y Dani Molina (Neuman) el disco se abre con la distorsión arrebatadora de "Letargo" y sus cinco minutos de pura hermandad shoegaze/dream-pop, será reincidente durante la escucha, abrazándote con su manto de melancolía.
"Espiral" fue el primer single avance del trabajo y por algo sería. Alicaído, con tendencia hacia la oscuridad a medida que va evolucionando, armando con guitarreo delay la sospecha de una traición.
El rock alternativo de "Desierta", con saborcillo a Slowdive incluido, se erige majestuoso debatiéndose entre la nostalgia y la inquietud, culminando en unos descarnados treinta segundos que quitan el hipo.
Ecos a The Smashing Pumpkins se cuelan en "Kaonashi" con sus sugestivos recovecos, fuzz a mansalva y latente energía ensoñadora. Nos va de perlas la llegada del primer interludio "Amanece en el pantano..." para coger aire tras un inicio de disco tan embriagador y presentarnos el etéreo medio tiempo "Último vals", cerrando la cara A del vinilo con esa épica contenida negándose a desplegar sus alas por completo.
Hablando de "alas" la segunda mitad de Reversia nos da la bienvenida con otras, unas "Alas rotas" que van directo al grano. Los SALVANA más afilados, desbordando pedales guitarreros en un tema donde el arco de Cupido falla más que una escopeta de feria.
Volvemos a merodear el lado más vaporoso de SALVANA con "Aguazul", un corte que agranda relevancia con cada escucha. Su tramo final es de traca.



