Después de siete años de su anterior larga duración KIEV CUANDO NIEVA vuelven con su fórmula magistral combinación de principios activos de pop intimista, trazos folk y psicodelia contenida, enfrascando una lírica tan escueta como críptica. Lo hacen de manera brillante con Duermen en discos (Great Canyon, 2025) coincidiendo con el 25º aniversario de la grabación de su primera maqueta, sin implicar una merma de frescura a su nueva referencia.
Javier Aquilué (voz, guitarra eléctrica, acordón, xilófono), Antxon Corcuera (teclados, coros), Jaime Sevilla (bajo) y Carlos Aquilué (batería, guitarra eléctrica, coros) han elegido en esta ocasión como compañeros de viaje al productor zaragozano Carasueño (Tulsa, Alondra Bentley, Big City) y al arreglista Alonso Díaz Carmona (Napoleón Solo, Soleá Morente).
El trabajo arranca con el cadencioso medio tiempo "Peine" y esos teclados añejos inyectando color sepia a una propuesta que siempre se ha sentido a gusto retozándose entre lo retro. Esas paradiñas con alma psicodélica combinadas a los coros nos dan la vida.
"Carpintero" lleva consigo un aroma a americana, empezando acústica para ir agregando instrumentos a medida que avanza el minutaje. La percusión minimalista y la tuba son los invitados inesperados para otro corte que enamora.
Llega "Despierto" y con ella la que debería encumbrarse como una de las canciones estatales del año. Ese cambio rondando los dos minutos y medio es de aquellas cosas que definen la grandeza de un grupo. Toda ella para enmarcar.
Esa especie de vals pop que es "Kes", inspirado en el libro de Barry Hines (1968), nos permite levitar por entre sus delicadas notas hasta caer en el regazo reconfortante de "Piezas".
Los señoriales vientos de "Opinión" aliándose a la voz de Lorena Álvarez junto a la de Javier; la guitarra acústica, la aparición del banjo a partir del break en el ecuador, luego los coros... Como resultado otro corte de apacible belleza, marca de la casa de KIEV CUANDO NIEVA.



